El gobierno de Estados Unidos anunció este martes un desembolso de $20 mil millones para Ucrania, como parte de un paquete de $50 mil millones aprobado por el G7, financiado por los intereses generados de activos rusos congelados. Según la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, estos fondos “proporcionarán a Ucrania una inyección crítica de apoyo mientras defiende su país”. Este respaldo es esencial para que Ucrania mantenga servicios de emergencia y hospitales, en medio de la invasión rusa, informó DW, en una reciente publicación.
Sin embargo, este anuncio llega en un momento incierto, justo cuando el presidente electo Donald Trump asoma como una figura que podría cambiar el enfoque de Washington hacia Kiev. Trump ha cuestionado el nivel de ayuda financiera a Ucrania, lo que genera incertidumbre sobre el futuro del apoyo estadounidense.
Los fondos fueron transferidos a un fondo del Banco Mundial y estarán disponibles para Ucrania tras meses de negociaciones sobre el uso de activos rusos congelados. La medida, sin embargo, refleja la tensión creciente sobre la dirección política que tomará el apoyo internacional a Ucrania en los próximos años.
gs (afp, reuters)