La Cyclocosmia, conocida como la “araña del reloj de arena”, es una especie fascinante y misteriosa. Estas arañas de trampilla son expertas en emboscadas, esperando inmóviles en sus guaridas hasta detectar el más mínimo movimiento de su presa. Su estrategia letal las convierte en depredadoras silenciosas del mundo subterráneo.
Lo más curioso de esta especie es su abdomen único, que recuerda a una moneda antigua. Durante siglos, los agricultores chinos las confundían con monedas enterradas, mientras los aztecas asociaban su aspecto con piedras solares. Este “blindaje” también les sirve para bloquear su refugio si sienten peligro.
Aunque su apariencia pueda intimidar, su mordedura no representa un riesgo para los humanos. Así que, si alguna vez encuentras una, respétala y admira su singularidad.